Más de 2000 devotos asistieron el martes pasado a la Catedral de Bogotá para conmemorar los 92 años de la última aparición de la Santísima Virgen en Fátima, Portugal. El acto religioso fue celebrado por el Representante de su Santidad Benedicto XVI en Colombia, Mons. Aldo Cavalli. Él fue acompañado litúrgicamente por los Heraldos del Evangelio – Caballeros de la Virgen. 

 

El evento inició con el rezo del Santo Rosario, que los feligreses acompañaron con cánticos entre misterio y misterio. Tras el rosario se dio inició a la misa con un marcha inaugural presidida por el celebrante y acompañada por los sacerdotes concelebrantes y miembros de los Heraldos del Evangelio -que portaban la imagen peregrina de Nuestra Señora de Fátima y que fue recibida por los asistentes con vivas y aplausos.

 

En su homilía, Mons. Cavalli, resaltó la importancia de la Virgen María en la vida espiritual de cada persona: “Por ser Ella la elegida por Dios para ser la Madre de Jesús, se convierte en nuestra Madre. [La Virgen] es una guía para llevar nuestra vida correctamente, siguiendo sus pasos y actuando como Ella lo hizo”, dijo.

 

Finalmente el prelado coronó la imagen de Nuestra Señora de Fátima y consagró a las familias a la Santísima Virgen.